La inteligencia artificial (IA) es la capacidad de una máquina de imitar el comportamiento humano. Por décadas se han creado obras sobre el tema, como el libro Yo robot (1950) de Isaac Asimov, donde se establecen las famosas tres leyes de la robótica o las películas Terminator, El hombre bicentenario o 2001, odisea del espacio.
Al respecto, el responsable del Laboratorio de BioRobótica Jesús Savage Carmona, de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, explicó que hoy tenemos un sistema computacional basado en las técnicas referidas, que funciona incluso en un celular y es capaz de ganarle al 90 por ciento de la gente. Pero, ¿un robot podría tener conciencia propia? Una forma de concebirla es como un monitor en el cerebro al que se le reporta lo que otros de sus módulos hacen.
De acuerdo con el investigador Jesus Savage, en 30 años estaríamos en posibilidad de crear una máquina con(IA) para atender a las personas en diversos escenarios, aunque no sería como muchos fantasean, sino un autómata habilitado para ayudar en tareas del hogar o, si está en un hospital, realizar diagnósticos acertados.
En México hay varios centros de investigación, institutos y universidades que desarrollan (IA). Hoy, estas técnicas se usan en forma cotidiana al realizar búsquedas en Google o al navegar por Facebook o Twitter, pues para su funcionamiento estos sitios emplean agentes inteligentes que analizan la conducta del usuario a fin de ofrecerle sugerencias o solucionarle problemas.