Actualmente el 54% del suelo mexicano es desierto y se prevé que para el 2025 esta cifra aumente al 60%, una situación preocupante y que debe de revertirse, asi lo señaló el delegado de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) en Tamaulipas, Antonio Neira Villajuana.
Mencionó que se trata de un problema de suma importancia lo que se refiere al cambio climático, y que la degradación del suelo es algo que puede revertirse todavía. Para ello “existen programas encaminados a combatir esta degradación del suelo, tales como la elaboración de zanjas bordo, de curvas de nivel, la reforestación, plantaciones comerciales y la parte de servicios ambientales”.
Explicó que específicamente en Tamaulipas se deben de mezclar las actividades agrícolas con las actividades forestales, las cuales se complementarían para evitar la desertificación, la erosión y las situaciones que se están presentando.
Finalmente, dio a conocer que los municipios que más afectados resultan por la desertificación en nuestro estado son San Fernando, Victoria y Llera, en donde se tienen que emprender acciones concretas para contrarrestar esta erosión del suelo.